Dinámica Jenga

En muchos procesos de selección de personal es usado este juego, para valorar habilidades sociales difíciles de descubrir con una simple observación del candidato o candidata al puesto. Esta realidad hizo que me animara a implementarla en el módulo de FOL, un módulo puente hacia el mundo laboral y que debería dar al alumnado herramientas para superar las situaciones con las que se encontrará, entre otros momentos, en el de la entrevista de trabajo.
Así que…me animé a jugar al Jenga.

Todo lo que había escuchado sobre realizar esta dinámica en el aula se quedó corto tras haber jugado con mi alumnado.
La información obtenida fue mucho más de lo que esperaba.
Realización: La clase está dividida en 4 grupos de trabajo de 3/4 alumnos/as. El juego se realiza entre los componentes del equipo. El primer equipo que empezó a jugar ya conocía el juego, eran 3 componentes, y basándose en sus conocimientos previos, ni me dejaron explicarles las normas…partían de que ya las sabían y comenzaron el juego. Pero su forma de jugar fue compitiendo entre ellos (las dos primeras fichas que movieron, eran estratégicamente decididas para que al siguiente jugador le supusiera problema seguir, o incluso, pudiera caerle la torre).
En este momento, paré el juego, y les expliqué que la competición era entre equipos, que mediría la torre de cada equipo, y el reto era conseguir, la torre más alta.
A partir de ahí cambiaron la estrategia y explicamos la importancia de no dar nada por hecho, de preguntar antes de no tener clara una orden dada en la empresa, y de poder cambiar la estrategia cuando no se ajusta a los objetivos.
El equipo 2, ya tenía más claras las normas, así que fue una estrategia conservadora. Un componente del equipo realizó gestiones de liderazgo marcando el camino a seguir. Su torre fue más alta que el equipo 1, pero con menos emoción.

El equipo 3 jugó en la siguiente sesión (otro día), y venía con la estrategia decidida previamente. Su objetivo era ser la torre más alta y querían poner las piezas en posición vertical (incumple normas).
Todos sus planteamientos previos se vinieron abajo.
El equipo 4 y 5 fueron los más lentos y menos arriesgados. Sólo tenían en mente superar la medida de las torres de sus compañeros y eso les hizo perderse en el camino, que fue lento y aburrido. En estos equipos alguno de los componentes estaba desmotivado, la presión por ganar no satisfacía las expectativas y restó diversión a la trayectoria.
Tras estos dos últimos equipos, se plantea un cambio en la dinámica, en la que hay que incluir tiempos. Con 5 a 7 minutos por equipo podría ser suficiente, y así valorar la presión en la conclusión de la tarea.
Conclusión: Muchos datos, mucha información sobre habilidades personales y una forma de hacer equipo pasándo bien. Hubo momentos de tensión, de risas y de aplausos de alivio cuando alguna pieza pudo ser retirada sin que la torre se cayera, aunque pareciera lo contrario. Aumentó la autoestima de algún alumno/a, ya que cuando parecía imposible…Sí pudo.

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